Hoy, en nuestros devocionales diarios, daremos un vistazo a la siguiente bienaventuranza: "Bienaventurados los misericordiosos, porque ellos serán tratados con misericordia..."La misericordia es uno de los atributos de Dios que se menciona con más frecuencia en toda la Biblia. El término "misericordia" describe el carácter de una persona que es altamente sensible a las necesidades de otros, se identifica con ellos y responde con los recursos a su alcance para aliviar o satisfacer la necesidad.
Dios da la promesa de que seremos tratados con misericordia si nosotros tratamos con misericordia a las demás personas.
Una de las cosas que más llena de gozo en la vida cristiana es tener un corazón misericordioso. Pues sólo los que son misericordiosos conocen las mieles de compadecerse de la necesidad humana.
Todos, en alguna manera, necesitaremos la yuda y misericordia de alguien en un tiempo futuro, por eso nunca dejemos pasar la oportunidad de ayudar y tener misericordia hoy. Aunque debemos tener presente que no siempre recibiremos misericordia de nuestros semejantes, y eso a pesar de habernos mostrado misericordiosos hacia ellos. Lo importante es tener misericordia de los demás, pues no necesariamente la recibiremos de ellos, sino directamente de Dios.
Jesús siempre tuvo un corazón misericordioso cuando anduvo entre nosotros, siempre se compadecía de la necesidad humana. ¡Si él lo hizo, deberíamos hacerlo nosotros también!
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